viernes, 29 de mayo de 2015

Verbindung

sigue siendo raro que las épocas se me acaben siempre en un aeropuerto, como cuando de camino a irlanda me prometí que las cosas no volverían a doler, cuando me deshice del miedo en un madrid-berlin o cuando sentí la tierra tocándome el pecho al despegar de thessaloniki la primera vez, feliz, plenx, llenx de todos los sentimientos lentos y buenos que quepan en una canción.

me aferro a lo positivo: he aprobado todas, he recuperado el ritmo de sueño, mis amigxs siguen ahú. supongo que me gustaría ir más allá. vielleicht diese kleine Notizen auf Deutsch zu schreiben. quizá no haber postergado los créditos. pero sé que lo he hecho lo mejor que he podido, que he sabido. es quizá la primera vez que hago lo mejor que puedo. me frustra la idea de no ser capaz como supongo que le frustra a todo el mundo, la cabeza llena de palabras y poco o nada claro.

me voy a españa unos días. me voy a grecia casi seis semanas. he pedido unos libros de yannis ritsos para volver a la introspección, pero hay algo icónico y peligroso en estos pasados tan brillantes. algo que, supongo, me da miedo. mi pasado era limpio, teleológico; lo era hasta Porto. ahora se parece más a cosas circulares, mucho más central y mi vida.

han pasado cosas raras. me he rapado el pelo, me lo he teñido de un verde violentísimo. estoy aprendiendo a dominar, algo que de alguna manera empieza por dominarme y por asumir que puedo. por aceptar la alegría. la de otrxs, la mía. hago deporte.

supongo. para bien. o. para mal. llevo un año y medio experimentando un cambio que he negado, extendido, violentado. he intentado detenerlo, detenerme a mí. por supuesto, no ha habido más resultado que despertarme con mucho camino hecho y tantas consecuencias. está bien. me siento activx. creadorx. capaz. me siento, en definitiva, asustadx y feliz.

me siento conectadx conmigo.

estoy decididx a vivir estos seis días al máximo, a hacer todo lo que las circunstancias de navidad no me permitieron. me queda la duda de si lo hago por los demás o por mí, pero demás es siempre una forma de egoísmo. sin condenarse.

[febrero 2015]
café en hamburgo. he comprado dos libros, llorado de felicidad porque las plantas están vivas, respirado, llorado de felicidad, visto puentes, besado a HA, besado una imagen de mí sobre mí y hablado con un alemán encantandor. kawaii(er) HUT

[diciembre]

domingo, 24 de mayo de 2015

berlin

suena manu chao, suena suave, no me importa que. salga. que salga bien. decir cosas que suenen bien. se me cierran los ojos por la alegría, hubo vino chileno, hubo mate con jugo infinito de granada. hubo aeropuertos infinitos, berlin anocheciéndose más tarde de las once. hubo también sol y piel oscura y muros violentos y botas sobre el asfalto y hamburguesas veganas. hubo emoción como un germen minúsculo bajo la piel que se va haciendo grande hasta ocupar el pecho, nenúfar-pájaro, posibilidad. el sbahn y la oruga de luz.

hubo berlin sin anochecerse, hubo cortinas azules y hubo también pájaro. hubo manzanas, música y fábricas abandonadas. hubo calles conocidas. hubo calidez. hubo palabras. berlin redescubierto tantas veces.

miércoles, 20 de mayo de 2015

dial II

es extraño vivir así. decir cosas que son mentira. no decirlas. es extraño esperar una mentira cuando menos se espera. pero cómo definir la mentira si no por la intencionalidad, y no la palabra. aterra volver a casa sola, pero aterra más no ser una a. aterra más haberlo dicho. aterra querer.

la única sensación lúcida que conozco es el dolor. lo demás me sobra. me sobra el calor, me sobran los trenes. me faltan más tormentas, me falta la oruga de luz y una máquina instalada en el pecho. una máquina violenta que me enseñe a moverme. a dejar de decir cosas que no son verdad. repito que te quiero por miedo a que te mueras y no poder decírtelo nunca más. vivo con miedo, erizada, boca abajo. dolorosamente feliz cuando me siento sin algo.

soy

un

pedazo

de

carne

un entramado perfecto de músculos que no funciona. un cuerpo débil. un cuerpo que podrá partirle a alguien la cara con seis meses de gimnasio. soy un cuerpo feo, peludo, grotesco. un cuerpo con tetas. un cuerpo pequeño. de lo demás alejadme. de lo que no sea cuerpo. de las mentiras, las palabras, lo indeterminado que se queda fuera de la piel.

me siento ridículx cuando me levanto. ridículx cuando uso la x. ridículo cuando herr f. mueve un poco la cabeza. ridícula. apenas en pie sobre los cartílagos. el peso infinito de tus palabras y cómo echo de menos la calma del subspace. la calma de flotar. cuando me perdí en el bosque y tenía seis años y los truenos. el perro-lobo me persiguió hasta los muros y rodé sobre la piedra y tenía un tobillo ensangrentado. te mentí una vez. te dije que la cicatriz era de una bicicleta.

pero no. era de un muro.

o tal vez era el horno a 255ºC

o quizá el quirófano

el muro. salté sobre el lobo, me lamió las manos y corrí. mi cuerpo gordo y pequeño y vestido de verde y falible. empecé a correr y solo paré delante de ti y ahora he saltado sobre el lobo y corro. no paro de correr. corro mientras hablo, mientras como, mientras follo. estoy sentadx frente a herr f y corro. escribo estas palabras mientras corro. no he parado nunca, me oyes. me oyes. me oyes. no he parado de correr. sigo así, hacia delante sin delante y bordo el camino que me han enseñado, salto fuera, me rapo el pelo. estoy solx solx solx

no se trata de que toda la gente sea igual ni de que toda la gente haga lo mismo y no se trata de que el dolor sea posible. se trata de no ser. de no verte. bueno. se trata de la intención. se trata de que sigo corriendo y te dejo atrás. se está tan solx aquí, cuando saltas sobre el lobo y te raspas la piel. me duelen las piernas pero que duelan y se hagan grandes, que se extiendan mis piernas en el mundo y me lleven lejos. me duele todo el cuerpo y el dolor no me calma. nada me calma, nada me sacia.

sigo

corriendo

(lejos de ti)

dial

empecé a sacarme fotografías porque me había perdido. siempre había mirado hacia fuera, intentando ser lo que se esperaba que fuese. alguien que se preocupaba. alguien capaz de procesar un mundo ajeno, de interactuar con lo otro. alguien que no figuraba ni en el margen, pero hacía todo el trabajo. fui capaz de ser esa persona durante casi dos años, hasta que casi se me olvidó ser una persona y casi se me olvidó vivir mi vida y hasta que tenía una. me gustaría decir que fui alguien rebelde, pero lo fui solo por fuera. luego dejé entrar muchas cosas. fue así. estuvo así. dentro de mí.

martes, 19 de mayo de 2015

gute Nacht

el pájaro que toco
ya no es el mismo pájaro
ni se parece
en nada a mí
y las palabras que me pautan
el pulso
son solo una réplica
a escala
de lo que fuiste

sin embargo
a veces duele ver
cómo las cosas se repiten
diminutas
en la pupila
un fallo en la reproducción
asexual
de las células
tus cuerdas vocales a 86bits
tensándose
intentando la réplica
imposible
de las cosas que dijiste
cuando hablabas alemán
perfecto

sin embargo
a veces duele
tanto
volver a casa

a veces duele 
tanto
no verte
y las palabras que se acumulan
en el hueco
de las costillas
me arrastran al fondo
de este cubo-lenguaje

pienso cada estación
como una posibilidad
de enterrar tus mentiras
una manera discutible
de no verte
y mientras corro os andenes para coger tren
empapadx de sudor
olvidándome el equipaje
corro viéndome en los cristales
el pelo tan corto
encuentro una incoherencia
dulce
entre ti
y la imagen de mí
que hiciste tuya

me veo lejos
a bordo de una oruga de luz
a miles de millones de kilómetros por hora
yo soy la oruga de luz
pautando mis propias respiraciones
este acelerón violento
de tus palabras
tus mentiras
de persona
minúscula
no me detiene
soy la oruga de luz
monto la espalda de la oruga de luz
y avanzo imparable
por una vía
aún sin construir
las vías de acero
se me hunden
en las venas

desperté en el hospital
la borrachera de vida
demasiado fuerte
y no te quise
no te quise
nunca

todas las mentiras
que de alguna manera
componen mi discurso
y esta soledad
la estación de magdeburg a las doce

estamos tan solo un skineta y yo
en la estación de magdeburg a las doce
me pide fuego
y no puedo ofrecerle nada
distinto
de mi velocidad
la energía de la oruga de luz
donde tú ya no estás
donde tú ya no estás

aprendí alemán para hablar contigo
y no estabas al otro lado
aún así sigues diciendo
gute Nacht
siempre que yo no esté ahí
para escuchar
el silbido

el silbido
de tus mentiras
blancas

(tus diminutas mentiras blancas
tu insoportable manera
de mirarte al espejo
buscando la culpa)

lunes, 18 de mayo de 2015

ansiedad

a mí me gustaría ir todos los días a clase, pero a veces no puedo y eso, con un sistema como el español, se vuelve complicado. con uno como el que tenemos en leipzig, las cosas van mejor, pero son aún así incómodas. quiero decir que es difícil. que yo iría todos los días a clase porque me hace feliz, porque me gusta lo que estudio, porque quiero aprender y mostrar y compartir. porque los seminarios son todo lo que había esperado. me gustaría ir todos los días a clase. siempre he querido hacerlo.

pero a veces no puedo y la gente que no me conoce me pregunta, o no dice nada. es incómodo. cuando te operan de apendicitis y te pierdes clase o cuando tienes la gripe de tu vida y te pierdes clase o cuando estás mal de los oídos y te pierdes clase. o. hay muchas formas sencillas de no ir a clase, abrir el mail, escribir lo que te pasa y volver al sofá sin rastro de culpa. esas formas sencillas.

a veces no puedo. es incómodo. me despierto y me quedo quieta y me parece que la habitación es minúscula o demasiado grande. me cuesta respirar. la idea de salir de la cama, ponerme la ropa, ver personas se me hace insoportable.

otras veces sí puedo. hoy he podido.

jueves, 14 de mayo de 2015

atenas II

camino

una hora en atenas y ya he comprendido la ciudad como la última imagen de la melancolía. si decidiera suicidarme, lo haría aquí -digo a los quince años-; si algún día decidiera suicidarme, lo haría aquí, bajo este sol y con este frío de febrero y estas piedras-símbolo mirándome. pero no quiero suicidarme.

es extraño vivir en una época donde las palabras-símbolo, las fronteras-símbolo, ya no significan. el faetón de mis once años y el ingenio -¡ingenio!- de alcibiades quedan lejos, eran y son un recurso retórico. hemos expoliado una imagen entera, la hemos sujetado con clavos al epitelio de europa y nos sorprende verla caer. es tan bonito caer.

la única atenas que sé mirar es la ciudad expoliada, la mentira arqueólatra, la ley de extranjería inventada por el extranjero. otros, los mismos que se llevaron las piedras-símbolo y que tradujeron medea a cómodos fascículos, sociedad de consumo, teatro universitario, CAPITALISMO


atenas

20. llegamos a atenas muy temprano, tras un vuelo terrible. pienso cosas tristes, la ciudad parece madrid y subimos la zona viaje muy necesitados de dormir. nos quedamos en un hotel y debe ser de las pocas veces que nos quedamos en un hotel y es raro, pero es barato y barato vence a lugar y barato es una respuesta necesaria. la acrópolis se multiplica sobre la montaña, incrustada en la montaña y pierde sentido. pero estoy aquí. el sol lo inunda todo.

nos despertamos a las doce como sobre arcilla blanca y me paseo desnuda por el balcón. el sol, el azul, mi pelo verde. empezamos a subir. me cuesta relacionar lo que veo con cualquier cosa que haya pensado o sentido sobre la ciudad. pienso un dolor que no es mío y trago. atenas es un invento de europa, un teatro sobre un pueblo de pescadores. trago. me hace feliz olvidar. escuchamos karakolia

nos sentamos en el teatro de dioniso. aquí, de alguna manera, ha empezado todo. mi historia, la que me pertenece, la que no dice nada.

jueves, 7 de mayo de 2015

cuerpo II

durante mi adolescencia tuve poco que decir sobre mi identidad. la lectura a la que me agarré era menos compleja, menos definida que el círculo desde el que se me veía. aún así. era algo palpable. sacaba buenas notas. no estudiaría ciencias políticas ni derecho. era rara. era lesbiana. estaba triste, a veces. estaba gorda y no hacía dieta.

sacaba buenas notas. me quejaba, pero no muy alto. no creía en el amor romántico ni en el sexo casual. hacía muchas cosas de las que no me daba cuenta, pero no definían mi identidad. quiero decir. no tenía claro el concepto de mi identidad porque yo sacaba buenas notas y era rara y estaba gorda y no me gustan los chicos, y así me definía frente al mundo. yo era lesbiana, no no-hetero. yo sacaba buenas notas, como clavo ardiendo. las sacaba sin esforzarme, siempre ha sido así. las saco sin esforzarme. esas notas eran quien yo era; quiero decir, esas notas me proyectaban como algo distinto de un fracaso.

pero. quiero decir. no me preocupaba parecerme a algo en un entorno donde todas las cosas se parecían entre sí. no me interesaba ser guapa y escribo esto con una honestidad que ahora me duele, por lo que significaba ser guapa. yo quería que me escuchasen y quería tener amigos y tuve muy buenos amigos. follé mucho más de lo que una chica gorda que saca buenas notas debería follar en su adolescencia. era más feliz de lo que yo quería pensar que era. o no era muy feliz. hay cosas que se han ido convirtiendo en granos de arena minúsculos. me cuesta recordarlas. me cuesta recordar no-ser-la-misma-persona.

a mí me decían que lo hacía bien y que estaba equivocada, todo a la vez. yo sacaba buenas notas, pero no iba a dirigir una empresa. yo no quería emprender nada ni tener un objetivo. a mí me faltaban sueños porque me habían dicho que sacaba buenas notas y que estaba bien y aún así no lo estaba. no me parecía a las cosas que se parecen entre sí. hay dos formas de reaccionar. la primera es la violencia no dirigida, la violencia hacia fuera, la violencia hacia los demás. ser problemático. la segunda es la violencia hacia dentro. eso se me daba bien, en la estética del no-conformismo, del oponerse sin gritar demasiado. me hice mucho daño, tanto daño como no estoy segura de ser capaz de hacerle a nadie. más daño del que me han hecho las personas que me han hecho daño.

las preguntas se han ido acumulando como pájaros que me traspasan el cuerpo. he aprendido a flotar, alejándome de la circunstancia, traspasando las palabras, intentando pronunciarme. tengo miedo, pero menos miedo que antes porque ahora sé que tengo miedo. cuando digo que no queda nada de la seguridad cómoda, quiero decir que desde hace dos años no queda nada de la seguridad cómoda. lo que no es trágico ni dramático ni terrible. lo que me ha enseñado a ser en una amplia escala de posibilidades, en un arco sobre otro arco.

me quejo más alto, me cuesta establecer vínculos reales con otras personas y aún así me dejo vincular más. soy menos cínica. estoy intentando encontrar mis pronombres.estoy intentando decir la verdad. ser otra cosa, ser muchas cosas, no ser una cosa. parecerme a mí, como siempre me he parecido a mí, pero sin la categoría de parecerse. no hacerme daño ni por dentro ni por fuera.

el sueño de romper las palabras hasta que te caes, hasta que ya no eres lo que eras; eras mucho más de lo que pensabas que eras. las cosas estaban ahí, pero las dejabas fuera. estaba bien usar solo una primera persona y ahora no lo está. palabra, pájaro, circunstancia.

no es posible salvarse siempre
menos si salvarse significa
atraer el dolor hacia dentro
dejar que el dolor
entre
más abajo del útero
el dolor como la violencia
el dolor es sagrado

pero no es posible salvarse siempre
es necesario romper
es necesario salir
y no tener miedo
de ausentarse
por meses
de la casa que hemos habitado
del cuerpo que hemos habitado

lunes, 4 de mayo de 2015

cuerpo

[A durmió anoche en mi casa. vimos una película que no tenía nada que ver con ninguna de las dos, una película divertidísima. reímos, dijimos cosas y fundí chocolate. nos sentamos en el sofá, las mantas, aún es mayo. yo participaba en un proyecto suyo. hablamos de libros, hablamos de cómo retratar lo complejas que son las personas en una secuencia de fotografías. hablamos de que simplificar a las personas solo vuelve más difícil decir. también escuchamos a adam lambert y vimos muchas series de fotos.

me siento muy afortunada de que A esté en mi vida y de poder enseñársela y del espacio de mi casa, que es mi casa un tiempo como mi vida, que también lo es un tiempo. solo que un tiempo más largo. espero que el proyecto salga adelante. espero que salga bien.

me veo en las fotos. el pelo cortísimo, las piernas abiertas, la sonrisa a medias, el cuerpo tirado sobre la cama. cómo odiaba mi cuerpo antes y cómo lo quiero ahora. este cuerpo que me deja correr, este cuerpo que me sujeta cuarenta y ocho horas despiertx. este cuerpo que se flexiona, este cuerpo con grasa abdominal y muslos más anchos por fuertes. este cuerpo nada abstracto, pegado a la tierra, falible. el cuerpo bajo la ropa, el cuerpo orgullosamente desnudo. los vestidos que me pongo, el collar que me ofreció HA hace un año y veinticinco días, las veces que me vendo las tetas, las botas con las que me he recorrido media Europa. este cuerpo blanco y pequeño y curvado y doblado sobre sí mismo. este cuerpo que tiene muchos orgasmos, que se excita con nada, que se tensa sobre el borde. este cuerpo. este cuerpo que muerdo y muerdes y muerdo otra vez de rabia y placer. este cuerpo que me atrapaba y me coge todavía, pero no me gana la partida porque somos amantes ahora, este cuerpo reclamado a la tierra, a las revistas, al tango de los productos, este cuerpo que es mío y que soy yo.

este cuerpo abierto al mundo

la cicatriz en el pecho derecho, la vulnerabilidad, la fuerza, las ganas, este cuerpo este cuerpo este cuerpo. yo soy este cuerpo. veo las fotos sin pensar, sin creerme este cuerpo]

juego

escribir un diario también es jugar y jugar se parece a tocarse las rodillas, a rasparse las manos al bajar del muro, a jugarse el diario y las rodillas y romperse las manos. escribir se parece. el otro día jugué a las cinco canciones que significan. algo. porque nos encantan las listas y compartimentamos. sin. decir nada. de lo que. tal vez. deberíamos haber convertido en un fluido exacto. pero volvemos a la necesidad. al juego. a las listas.

así que he elaborado una lista de las canciones y vídeos que me representan mejor que mi poesía. que no dicen nada de mí, por tanto. que dicen. bien. que esto era un juego y que jugamos porque estamos vivos.

jugar es lo que me ha devuelto a la vida
jugar
y ser creativa
y ser capaz
y rasparse las manos
al bajar del muro
porque sin dolor
no hay posibilidad
de cambio

1. iron de woodkid. este vídeo o foto en movimiento o gramática de la foto me recuerda a erwin olaf. y erwin olaf es mi fotógrafo favorito en el mundo mundial. esta es la canción que escucho si duele. con esta canción fui un chico por primera vez. con esta canción me corrí mientras me azotaban. y la fotografía otra vez. hay algo regio en la no-guerra, algo lentísimo e incoherente. 




2. the weeping song de nick cave. la canción de los años que se mueren y la página en blanco que es enero. el miedo a no volver a ser nunca más. la alegría clarísima de la derrota. lo blanco. lo sentencioso de los versos, el absoluto de las respuestas. la doblez y el doble. no volver. balancearse. el mar está hecho de juguete.



3. elephant gun de beirut. cuando me marché de compostela me prometí que no iba a volver a estar en un mismo lugar, una misma persona, un mismo reflejo que no se pareciese a mí. no cargué armas: me desnudé. y fui muy feliz. desde entonces he cogido muchos aviones, pero menos de los que esperaré en el futuro. he aprendido tres idiomas nuevos. me he ido de la ciudad, hasta que la Ciudad no significaba nada frente al mapa. y he intentado crear un signo dentro de mí, he intentado ser mi ciudad. he empezado a cuidarme.



4. good man down de ewert and the two dragons. viajar a letonia y estonia fue un bálsamo azul. me fui con una persona a la que quiero, me fui un poco rota, me fui con ganas de carretera. volví pensando mucho en mí. volví más capaz de querer y de ser. esta canción es sobre todas las cosas que no me atrevía a hacer y acabé haciendo sin darme cuenta. sobre levantarse y ser capaz cuando pasa la catástrofe. sobre la operación que me ha dejado el pecho derecho más pequeño que el izquierdo. sobre la llanura de estonia, el mar azulísimo en pärnu. sobre mi forma de ser valiente.



5. epilepsy is dancing de anthony and the johnsons. pocas cosas me dan tanta calma como esta melodía suave y me obligan a reinterpretar. otra vez una fotografía vuelta vídeo, otra vez un discurso (mal) escrito en la piel. esta canción me hace pensar en la ansiedad, pero en las cosas de la ansiedad que ya he superado. en el instante. los ciervos.